Buenos días, ¿qué tal ha ido la
semana?
En estos días en los que en el rosa y
el rojo han invadido los blogs yo os traigo una receta verde que
puede ser el contrario de estos dos colores. La verdad es que he
estado un poco despistada con esta fecha aunque tampoco no iba a
preparar nada invadido de corazones. Estos crepes de espinacas puede
que no sean los más románticos del mundo, pero están buenísimos y
además son más o menos sanos
Nunca me ha hecho mucha gracia las
espinacas, o eso pensaba yo. Cuando las comía y las mordía me daban
una dentera horrible lo que hacía que no quisiera seguir comiéndolas
hasta que descubrí los paquetes de espinacas congeladas y trituradas
de Mercadona. Entonces me di cuenta que no es que no me gustara el
sabor sino que no me gustaba la textura, soy así de rara, y desde
entonces hago muchas recetas con este ingrediente. Un día en casa de
mi hermana estaba ojeando el libro de Isaweis "Cocina Sana Para
Disfrutar" y descubrí esta receta así que aprovechando un día
que mi madre y yo comíamos solas preparé estos crepes aunque
adaptándolos para que fueran sin gluten. Tengo que reconocer que
tengo un poco el síndrome de las tortitas y soy incapaz de que me
queden crepes finitos sino que me salen tortitas grandes, pero
igualmente estaban muy ricos. En esta ocasión los rellenamos de
queso de cabra fresco de Lanzarote y pavo, pero los podéis rellenar
de lo que más os guste.
Ingredientes (6 unidades)
- 70 g de harina de arroz
- 30 g de maizena
- 5 cucharadas de leche sin lactosa
- 1 yogur natural de soja
- 1 huevo
- 200 g de espinacas
- 1 cucharada de aceite
- Pimienta y sal
- Trituramos las espinacas y reservamos.
- En un bol mezclamos el huevo, la leche, el yogur, el aceite, la sal y la pimienta.
- Añadimos las harinas y removemos.
- Una vez esté todo bien integrado añadimos las espinacas y revolvemos.
- Dejamos reposar 30 minutos.
- Hacemos los crepes y rellenamos.
Como veis es una receta muy fácil de
preparar y una manera divertida de comer verdura.
Feliz semana :)
4 comments
¡¡Hola Marta!! A mi de pequeña tampoco me gustaban las espinacas, y ahora me encantan. Y no sólo cocinadas, porque las espinacas baby para ensalada me gustan muchísimo, y las como semanalmente. Así que no dudo que tus crêpes de hoy me van, y con ese relleno tan rico, más. Besitos.
ResponderEliminarYa me contarás qué te parecen. Muchas gracias Isabel :)
EliminarVerás Marta, resulta que el color verde es complementario del rojo. Lo recuerdo de mis clases del dibujo, así que muy desencaminada en colores ¡no vas esta semana! ja ja ja
ResponderEliminarEn el tema "no es cuestión de sabor, es cuestión de textura" te entiendo. A mí me ocurre con las alcachofas ¡y mira que lo intento!
Estos crepes me han resultado muy apetecibles y me encanta que sean gorditos ¡así quedan más jugosos!
¡Besos mil!
No sabía eso del color complementario, pero me encanta. Al final no voy tan a corriendo como pensaba jajajaja
EliminarMuchas gracias Cuca :)
Ya sabéis la ilusión que hacen lo mensajes y yo no iba a ser menos.
Me encanta leer vuestros comentarios y siempre que pueda los contestaré.
¡Muchas gracias por pasaros y comentar!
Un beso :)
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