Buenos días, casi
tardes. ¿Queda alguien por aquí?
La entrada de hoy se ha
retrasado un poco, pero aún así aquí la tenéis que ya que yo no
tengo vacaciones el blog tampoco. Yo soy incapaz de dejar el horno
sin encender aunque también es cierto que viviendo en Vitoria
tampoco se sufre mucho.
No es por dar envidia a los que vivís en un
sitio de calor, pero hace dos días estaba en el sofá con manta y
sudadera y por no me he quitado las mantas, sí en plural, de la
cama. Yo es que el calor lo llevo muy mal así que estoy agradeciendo
mucho pasar este verano en el norte después de tanto tiempo.
La receta que os traigo
hoy es muy rápida de hacer y aunque lleva horno tampoco sufriréis
mucho ya que aunque lleva un rato que se haga la temperatura del
horno es bastante baja. Aunque casi me quedo sin hacerla y es que
para mi el nombre es impronunciable, y más con mi dislexia que cada
vez lo escribo de una manera diferente, y aunque sabía que tenía
guardada la receta no me acordaba del nombre y no la encontraba entre
mi lista interminable de recetas pendientes.
Tengo que aclarar que el
clafoutis se hace con cerezas, cerezas a las que no se quita el
hueso, pero después de todo lo que sufrí con el aparato y el
dineral que se dejaron mis padres me parecía muy triste partirme un
diente mordiendo una ciruela así que descarté esta opción. Ponerme
a deshuesar cerezas me daba una pereza terrible así que busqué por
Internet otras versiones. El clafoutis es típico de de Francia y en
algunas regiones se hace con otras frutas, pero entonces se llama
flognarde. Así que viendo la fruta que he utilizado yo es como se
debería llamar esta receta, pero flognarde me parece más
impronunciable que clafoutis y seguro que si la hubiera llamado así
nunca más la habría encontrado en mi libro de recetas.
Se llame
como se llame esta receta es muy fácil de hacer ya que la masa es
muy parecida a los crepes y está buena tanto caliente como templada,
pero eso sí os aviso que es adictiva, yo en un momento me comí
media tarta sola. Me ha gustado tanto que seguro que la preparo
pronto con otro tipo de frutas.
Ingredientes
- 125 g de arándanos
- 125 g de frambuesas
- 3 huevos
- 150 ml de leche
- 150 ml de nata
- 110 g de azúcar moreno + un poco para espolvorear el molde
- 60 g de mantequilla + un poco para engrasar el molde
- 50 g de almendra molida
- 50 g de harina
- Azúcar glas
- Precalentamos el horno a 150º.
- Untamos el molde con mantequilla y espolvoreamos azúcar moreno.
- Derretimos la mantequilla
- Batimos los huevos con el azúcar.
- Vertemos la mantequilla ya templada.
- Incorporamos la harina y la almendra y batimos.
- Vertemos la leche y la nata.
- Ponemos la fruta lavada en el molde y echamos la masa por encima. Espolvoreamos con un poco de azúcar moreno.
- Horneamos 60-70 minutos.
- Es mejor esperar que se enfrié un poco antes de decorar con el azúcar glas y comerlo.
Nos vemos la semana que
viene con una nueva receta. Feliz semana :)
1 comments
¡Hola Marta!
ResponderEliminarYo por acá estoy igual, hace tres días ha estado un poco más fresco que de costumbre (sobre todo para ser agosto, incluso me parece que hoy más, hasta se podría decir que estoy muy bien abrigada, se me hace tan raro que este agosto no ha sido el de siempre. Sólo la primeras dos semanas tuvimos calorcito.
Yo podría comer todos los días clafoutis, ¡me fascina! Me encanto que combinaras las dos frutas. ¡Delicioso!
Ya sabéis la ilusión que hacen lo mensajes y yo no iba a ser menos.
Me encanta leer vuestros comentarios y siempre que pueda los contestaré.
¡Muchas gracias por pasaros y comentar!
Un beso :)
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